El concepto “reserva de valor” quiere decir la capacidad de cualquier activo en conservar su valor sin depreciarse con el transcurso del tiempo: ¿qué activos entonces tienen estas características?

Conservar Pesos es un buen ejemplo de un activo que no es “reserva de valor”: verificando la capacidad de compra que tenía la suma de 100 Pesos hace 1 año en comparación con lo que se puede comprar hoy nos damos cuenta la desvalorización que tuvo este activo y tiene año tras año. No es racional conservar Pesos en el tiempo.

¿Dinero de otros países (dólar estadounidense, euro o yen japonés) representan activos que son “reserva de valor”? El dinero es un medio de pago y su principal utilidad es facilitar el intercambio de bienes y servicios. Puede verificarse que el dinero emitido por las principales potencias mundiales no es “reserva de valor”, representan activos líquidos para transacciones comerciales: los bienes y servicios que se pueden comprar hoy con un dólar estadounidense son bastante menores que los que se podían comprar hace 30 años; este es un ejemplo suficiente de que el dinero de cualquier país, incluso de Estados Unidos, se desvaloriza con el paso del tiempo. Si bien la tasa de inflación en Estados Unidos fue bastante baja en los últimos años, en la década del 80 llego al 20% anual. Al fin y al cabo, la inflación refleja la desvalorización del dinero; mayor inflación implica menor valor del dinero. Entonces el dinero no es “reserva de valor”.

¿Entonces que activos son “reserva de valor”?

Uno de los mejores activos que existe en este mundo y es “reserva de valor” es el oro. Este activo tiene todas las características que necesitamos:

1) hay un suministro limitado,
2) hay suficiente demanda para este activo,
3) es de fácil intercambio,
4) no es perecedero y,
5) hay un mercado mundial que determina su valor monetario. 

Otro de los activos que especialmente en Argentina es “reserva de valor” son los activos inmobiliarios. Los ciudadanos argentinos encontraron en los “ladrillos” la solución para conservar y mantener sus ahorros con el paso del tiempo. Frente a las sucesivas crisis económico financieras y también ante la altísima presión impositiva que caracteriza al país, los activos inmobiliarios argentinos demostraron su capacidad de conservar valor. 

Quedo aún más evidenciado que los activos inmobiliarios durante la pandemia 2020-2021 conservaron excepcionalmente su valor: un último informe de los diarios El Cronista y La Nación junto a la plataforma inmobiliaria Zonaprop aseguran que desde su pico máximo en 2019 los precios de los inmuebles registraron un insignificante ajuste del 10%; esto quiere decir que los inmuebles conservaron su valor aun frente a un contexto internacional desfavorable y sin la presencia de un Banco Central que incentivara el consumo de inmuebles mediante bajas tasas de interés. En los principales países, los Bancos Centrales sostuvieron el mercado inmobiliario local mediante la reducción de las tasas de interés de hipotecas provocando incluso la suba de los precios de los inmuebles, creando un mercado lucrativo con dinero bancario.

Como sabemos hoy y hace tiempo, en el país no existe crédito hipotecario para la adquisición de inmuebles. No es que no exista, sino que los porcentuales a los que está expuesto hace inalcanzable la calificación de ingresos aún del grupo familiar para obtenerlo.

Esto hace que quien tiene un activo inmobiliario no contraiga deuda sobre él y quienes están en este caso no llegan al 6% de los propietarios de inmuebles. En la actualidad la compra de inmuebles en Argentina se realiza prácticamente al contado. Esto hizo la diferencia con etapas en el país como la del 2001, cuando el porcentual de adquisiciones durante la década del 90 superaba el 57% con crédito inmobiliario, lo que provocó la caída abrupta de los precios de los inmuebles en el año 2001-2002

Sin existencia de crédito bancario inmobiliario y la facilidad, practicidad y seguridad de resguardar el patrimonio en inmuebles, los activos inmobiliarios se presentan para los argentinos como el mejor candidato para conservar valor en el tiempo.

El ahorro es la base de la …. pero la fortuna se hace con activos inmobiliarios. 

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